Momentos de terror vivieron 12 pasajeros de un vuelo de la aerolínea LATAM que se dirigía a Chile este lunes, luego de que un "incidente técnico" provocara una brusca pérdida de altitud que los lanzó al techo de la aeronave.
El percance, que obligó a un aterrizaje de emergencia en Auckland, Nueva Zelanda, dejó a uno de los pasajeros en estado grave y a otros 11 con lesiones de diversa consideración.
Según los testimonios de los pasajeros, el avión Boeing 787 Dreamliner, que había partido de Sídney con destino a Santiago con escala en Auckland, experimentó una súbita caída mientras sobrevolaba el mar de Tasmania.
La violenta sacudida lanzó a los pasajeros que no llevaban puesto el cinturón de seguridad contra el techo del Dos pilotos se quedan dormidos en un avión en pleno vuelo: un susto en el cielo.
"La gente salió volando porque no llevaban sus cinturones", declaró un pasajero a la radio pública RNZ.
"Algunas personas quedaron bastante heridas.
La gente tuvo realmente miedo", agregó con voz temblorosa.
LATAM confirma "incidente técnico" y lamenta "molestias"La aerolínea LATAM, con sede en Chile, confirmó el incidente y lo calificó como un "incidente técnico durante el viaje que provocó un fuerte movimiento", sin proporcionar más detalles sobre la causa del mismo.
La compañía lamentó "las molestias causadas por esta situación".
El avión, con 233 pasajeros y 14 tripulantes a bordo, pudo aterrizar sin problemas en el aeropuerto de Auckland, donde las autoridades desplegaron un operativo de emergencia con ambulancias y personal médico.
Doce pasajeros hospitalizados, uno graveDoce de los pasajeros, incluyendo tres miembros de la tripulación, fueron trasladados a hospitales de la ciudad.
Uno de ellos se encuentra en estado grave, mientras que los demás presentan lesiones de diversa consideración.
Las autoridades de aviación de Nueva Zelanda han iniciado una investigación para determinar la causa del "incidente técnico" y las responsabilidades del mismo.
Recomendaciones para la seguridad aéreaEste incidente pone de relieve la importancia de abrocharse el cinturón de seguridad en todo momento durante un vuelo, incluso durante los períodos de aparente calma.
La rápida acción de la tripulación y el eficaz operativo de emergencia en tierra fueron claves para minimizar las consecuencias del percance.
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