
Kylian Mbappé y Hakimi Achraf, astros de Francia y Marruecos, son amigos y compañeros en el PSG.
(Fotoarte: Héctor Quispe).
El literal 'caballo negro' de , , desafiará este miércoles 14 de noviembre a la campeona defensora , y de sacudirse a otro hermano histórico mayor en lo político y comercial en lo futbolístico, como lo hizo ante .
Tras dejar la fase de grupos y victimar al hilo a la Furia Roja y a para llegar a la Semifinal, la escuadra marroquí desea tener un galope todavía más sorprendente y clasificar a la Final de la máxima justa, donde ya espera Argentina.
El encuentro será en el Al Bayt Stadium, a las 13:00 horas del centro de México.
Achraf Hakimi es su gran astro, pero ahora deberá aprovechar todos los recursos disponibles y amplificarlos para vencer a una de las escuadras más poderosas del planeta, los franceses liderados por Kylian Mbappé.
Ambos son amigos y compañeros en el Paris Saint-Germain de la primera división francesa, club en el que también juegan Lionel MessiNeymar Jr.
Marruecos es el equipo con más futbolistas no nacidos en su país compitiendo en la Copa del Mundo, con un total de 14, seguido por Senegal y Túnez, con 12 cada uno.
Dos tienen origen galo: el capitán, Romain Saïs, defensa del Besiktas de la Súper Liga turca y Sofiane Boufal, volante del Angers de la Ligue 1 francesa.
El director técnico Walid Regragui, también nació en Corbeil-Essonnes.
Habrá que tomar en cuenta una fuerza interior para este representativo africano, que querrá bañarse de gloria también en el terreno futbolístico ante otro de sus adversarios legendarios en otras canchas de la vida.
La colonización de África comenzó con la colonización francesa de Argelia en 1830.
Después continuó con Túnez en 1881 y en Marruecos en 1912.
A partir de ahí sucedieron hechos cruciales que marcaron el desarrollo del pueblo marroquí.
Se trata de una nación antigua y su actual rey, Mohammed VI, proviene de la dinastía alauí, dominante en ese país desde el siglo XVII, reseña en documentos la Embajada de Marruecos en España.
Imperios e invasores romanos y árabes llevaron el islam y su extensión territorial fue aprovechada por países de Europa, al otro lado del Mediterráneo, y con el resto de África, expone un documento de la Universidad Complutense de Madrid, aportado por José Martínez Carrera.
En esa región habitaban los bereberes,la raza que se extendió desde los desiertos de Egipto en el África septentrional hasta el océano Atlántico, y desde las costas del Mediterráneo hasta el interior del desierto del Sahara.
Los bereberes apoyaron a Aníbal y a los cartagineses contra Roma en las Guerras Púnicas (264-202 a.
C.
).
Por ello es que el emperador romano Calígula declaró el final de la autonomía bereber en el Magreb en el 40 d.
C.
Las actividades francesas en Marruecos con fines comerciales datan del siglo XIX.
En 1904 Francia y España acordaron en secreto un primer reparto del territorio.
El sultán Mulay Hassan intentó recabar apoyo entre los bereberes del Alto Atlas a finales del s.
XIX, pero para entonces ya era demasiado tarde.
Alrededor de 1830, Francia ya tenía intereses en Marruecos y se había aliado con los bereberes por todo el norte de África para eludir a los otomanos.
Tras siglos de luchas contra los marroquíes, España consiguió controlar zonas del norte de Marruecos en 1860, a la par que generaba un duradero resentimiento por desacralizar cementerios, mezquitas y otros lugares sagrados en Melilla y Tetuán.
Mientras la reina Victoria de Inglaterra entretenía a los dignatarios marroquíes y presionaba para conseguir reformas legales en Marruecos, sus emisarios estaban ocupados en cerrar acuerdos con Francia y España.
El Tratado de Fez de 1912, que convertía a Marruecos en un protectorado francés, hizo oficial la colonización y los franceses eligieron a un nuevo sultán manejable.
Aunque durante la II Guerra Mundialprotectorado francés de Marruecos era en teoría un aliado de la Francia colaboracionista de Vichy y de Alemania, la ciudad de Casablanca, que se caracterizaba por su espíritu independiente, proporcionó apoyo terrestre crucial para la campaña militar desarrollada por los Aliados en el norte de África.
Cuando Mohammed V murió de un ataque cardíaco en 1961, su hijo Has-san II se convirtió en el líder de la nueva nación.
Enfrentado a una base de poder poco sólida, una economía inestable y elecciones que evidenciaron divisiones incluso entre los nacionalistas, consolidó su poder reprimiendo a los disidentes y suspendiendo el Parlamento durante una década.
Con una fuerte deuda para financiar presas y desarrollos urbanísticos y una abultada burocracia, la deuda externa de Marruecos en la década de 1970 era descomunal.
La Guerra Civil española tuvo un papel preponderante.
Culminó en 1939 con la victoria de las tropas franquistas sobre el bando republicano.
El protectorado español en el norte de África no terminaría hasta 1956, cuando Marruecos consiguió su independencia y surgió como el Estado que hoy conocemos.
Desde entonces, hay lazos más de sangre histórica entre los pueblos francés, español y marroquí.
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