La investigación sobre la desaparición de Madeleine McCann, la niña británica que desapareció de su habitación de hotel en Praia da Luz, Portugal, en 2007, ha dado un nuevo giro con la búsqueda de un segundo sospechoso.
Christian Brueckner, un ciudadano alemán que ya estaba siendo investigado por el caso, ha sido acusado formalmente de tres violaciones y otros dos delitos contra menores en Portugal entre los años 2000 y 2017.
Brueckner niega cualquier participación en la desaparición de Madeleine.
Las nuevas pruebas apuntan a que Brueckner pudo haber contado con la ayuda de un cómplice, identificado como Ralph H.
, un amigo íntimo con antecedentes penales.
La policía sospecha que Ralph H.
pudo haber ayudado a Brueckner en otras actividades delictivas.
Ralph H.
es un viejo amigo de Brueckner que vivía en la misma zona de Praia da Luz donde se encontraba la familia McCann.
Según el diario británico The Sun, la policía alemana allanó la propiedad de Ralph H.
en busca de pruebas, pero no pudo entrar al no tener una orden de cateo.
Un nuevo testigo ha declarado que Brueckner estaba trabajando ilegalmente en el complejo Ocean Club donde se hospedaba la familia McCann.
Según este testimonio, Brueckner recibía dinero en efectivo por su trabajo y, junto a Ralph H.
, podría haber planeado el secuestro de Madeleine.
El juicio contra Christian Brueckner continúa en Braunschweig, Alemania.
Uno de sus amigos, Christian Post, quien reside en Camboya, ha sido citado a declarar.
A pesar de los nuevos avances en la investigación, el caso de Madeleine McCann sigue siendo un misterio sin resolver.
La búsqueda de la niña continúa 17 años después de su desaparición.
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