Durante la noche de este 4 de julio, el de Resistencia Civil Apatzingán, Julio César Acosta Grajeda, fue atacado a balazos después de haberse manifestado en contra del gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, por la violencia que se vive en la zona de Tierra Caliente.
De acuerdo a los reportes de medios locales, Acosta llevó a cabo una transmisión en donde informó que el 27 de junio había sido víctima de un intento de secuestro, desde entonces interpuso la denuncia correspondiente.
“El 27 de junio pasado, fui víctima de un posible atentado; de un posible levantón.
Ahí en mi casa llegaron unas camionetas", dijo.
Sin embargo, el activista mencionó en el live de sus redes sociales que si le pasaba algo, sería culpa del subdirector de la policía, Jesús Rangel Barajas, y del presidente municipal de Apatzingán, José Luis Cruz Lucatero.
En el video reveló que intentó acercarse a los eventos del mandatario michoacano, para reprocharle que Apatzingán no estaba en paz como lo había dicho.
Pero, mientras el joven estaba siendo baleado, el mandatario Ramírez Bedolla presumía su cena en una taquería en la misma ciudad.
La madrugada del pasado 26 de junio el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Cárteles Unidos tuvieron su último y más reciente enfrentamiento en Apatzingán, Tierra Caliente, Michoacán.
Recientemente, unos 700 habitantes de los poblados de Las Bateas, el Tepetate y Los Llanos, éste último ubicado a unos 180 kilómetros de , dejaron sus hogares por la violencia derivada de los enfrentamientos del narcotráfico.
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