Indignación en Turquía por respuesta tardía del gobierno ante terremotos

y políticos de oposición responsabilizan al mandatario Recep Tayyip Erdogan por la mala y lenta respuesta de las autoridades para auxiliar a los afectados



Conforme pasan los días y continúan las labores de rescate, miles de cuerpos sin vida son recuperados y sumados a la ya elevada cantidad de 11,200 muertos a causa de los en y .

Pero después de la tragedia, los ciudadanos turcos comenzaron a cuestionarse el porqué la respuesta del gobierno fue tan lenta y, sumados a políticos de oposición, alzaron la voz en contra del presidente Recep Tayyip ErdoganEn se han contabilizado cerca de 8,500 fallecidos a tan solo dos días del , por lo que dicha cifra continuará elevándose conforme pase el tiempo, a lo que la población turca reclama la lentitud con la que los cuerpos de rescate han actuado, ya que en diversas poblaciones afectadas aún no reciben ayuda alguna.

Kemal Kilicdaroglu, líder del Partido Republicano del Pueblo, responsabilizó al actual mandatario turco, Recep Tayyip Erdogan: "Si hay una persona responsable de esto, es Erdogan (.

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) no se ha preparado para un terremoto en 20 años", condenó el líder opositor, al criticar la incapacidad de respuesta del país ante un desastre de estas magnitudes.

Otra de las inconformidades de los ciudadanos es por el impuesto de terremotos que se recauda , derivado del sismo de ese año en el que murieron 17,000 personas, y el cual debería de contar con 4,600 millones de dólares actualmente para invertir en servicios de emergenciaprevención de desastres.

Hasta la fecha, el gobierno turco no ha explicado para qué se usa o dónde se invierte lo de Cada cierto tiempo en que se genera un , la ciudadanía cuestiona dónde está ese dinero y, debido a que la está condicionada por el gobierno, las redes sociales fungieron como , en donde se incrementan cada vez más los testimonios de las personas sobre sus quejas al gobierno: “¿dónde está el gobierno?, ¿por qué el apoyo tarda tanto?, la ayuda no es suficiente”.

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, arribó a la ciudad de Kahramanmaras para gestionar las labores de rescate y entrevistarse con su pueblo para escuchar sus peticiones, a los que incitó a ignorar a los provocadores y se apegaran a lo que transmiten las autoridades.

Su principal argumento para justificar las declaraciones de la gente en redes, fue que hubo problemas con las primeras respuestas de rescate debido a la saturación de carreteras y aeropuertos, pero que ya se llevan a cabo normalmente: "Hemos movilizado todos nuestros recursos (.

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) el Estado está haciendo su trabajo".

El día de ayer, declaró el estado de emergencia en las 10 provincias más afectadas de durante , para finalizar aproximadamente a mediados de mayo de 2023, un mes antes de las elecciones presidenciales, en las que buscará continuar en el poder después de 20 años al mando.

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