
homicidio al juez de Control, Roberto Elías Martínez,Fiscalía General de Justicia identificó a cuatro presuntos asesinos.
Ellos habrían seguido las órdenes de dos hermanos recluidos en los Centros de Readaptación Social en Río Grande y Cieneguillaslas noticias, ya te informamos que el Juez de Control fue atacado con disparos y llevado al hospital, donde pasó de estar grave a finalmente fallecer.
A una semana del asesinato en el municipio de Guadalupe, los presuntos autores materiales del ilícito fueron puestos a disposición del juez de control.
Aparentemente, los capturados pertenecen a un grupo de la delincuencia organizada, de acuerdo con Francisco Murillo Ruiseco, fiscal general de justicia del Estado.
El fiscal, durante una conferencia de prensa, dio a conocer que los trabajos de inteligencia junto con 11 órdenes de cateo en los municipios de Zacatecas y Guadalupe, ayudaron a elaborar una línea sólida de investigación.
La línea de investigación dice que dos de los implicados, José Julián y Ángel Said, al igual que Leopoldo Ismael, fueron quienes realizaron el ataque armado contra el juez de control bajo órdenes de los hermanos Marco Antonio, José Isabel y Fernando, quienes planearon todo desde los centros penitenciarios, porque ambos están encerrados por delitos y por ser integrantes del crimen organizado.
Los hermanos serán investigados en el centro penitenciario del distrito judicial de Río Grande en calidad de autores mediatos.
Luego de las dos de la tarde del sábado, los detenidos fueron puestos a disposición del juez de control para resolver la situación jurídica sobre los hechos.
La línea de investigación concluyó en que el juez se pronunció en algún asunto de los hermanos en el centro penitenciario de Río Grande, por lo que el móvil del delito pudo haber sido el desempeño jurisdiccional del juez.
Elías Martínez murió durante la mañana del domingo 4 de diciembre derivado de las lesiones por bala que vivió un día antes al momento de salir de su casa en el municipio de Guadalupe.
Durante su labor, él tenía a su cargo procesos penales de integrantes de grupos delictivos, homicidas y secuestradores de Río Grande, cerca de Frenillo, uno de los que cuentan con un alto índice delictivo y que es considerado como el más inseguro.
Arturo Nahle García, luego de los hechos, reconoció que “todos los jueces y juezas están en riesgo de represalias y de actos de venganza por las sentencias que a diario dictan a los criminales”.
Esto lo llevó a decir que el homicidio es la muestra del riesgo que corren aquellos que se dedican a la impartición de justicia.
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