El hombre acusado de un tiroteo en París, contra la comunidad kurda, admitió que tiene un odio "patológico" hacia los inmigrantes, según revelaron los fiscales franceses.
El hombre de 69 años dijo a los investigadores que había planeado matar a "extranjeros no europeos" cuando se embarcó en su ola de disparos el viernes.
El sospechoso fue puesto en atención psiquiátrica después de ser interrogado por la policía.
Está acusado de abrir fuego contra un centro cultural kurdo, matando a tres personas e hiriendo a otras tres.
El hombre, un conductor de tren jubilado llamado William M.
, le dijo a la policía que se había vuelto "deprimido" y "suicida" después de que robaron en su casa en 2016, dijo el domingo la oficina del fiscal de París.
Admitió que desde entonces, su odio a los extranjeros se había "vuelto totalmente patológico", agrega el comunicado.
Dijo que el viernes primero fue a Saint-Denis, un suburbio de alta inmigración en el norte de París, para matar a los "no europeos", pero encontró pocas personas allí.
Luego viajó al centro kurdo Ahmet-Kaya en el distrito 10 de París, donde llevó a cabo el ataque.
El hombre estaba resentido con esa comunidad porque los milicianos kurdos involucrados en el conflicto sirio habían "tomado prisioneros durante su lucha contra el Estado Islámico en lugar de matarlos", dicen los fiscales.
Un restaurante cercano y una peluquería también fueron atacados antes de que el hombre fuera arrestado.
Fue detenido bajo sospecha de asesinato, intento de asesinato y actuar con un motivo racista.
Tiene antecedentes por delitos con armas y ha trascendido que fue puesto en libertad bajo fianza días antes del asalto.
El año pasado fue acusado de violencia racista por un ataque con espada en un campamento de inmigrantes en la capital francesa.
Los tiroteos provocaron disturbios el viernes y el sábado .
Los manifestantes iniciaron incendios en las calles, rompieron ventanas de autos y se enfrentaron con la policía.
La violencia se desató después de que los kurdos se reunieran pacíficamente en la Place de la République para rendir homenaje a las víctimas.
Tras los disparos, los kurdos han vuelto a pedir a las autoridades francesas una mejor protección.
Los líderes comunitarios se reunieron con el jefe de policía parisino el sábado.
La comunidad volvió a tener "miedo", tras haber quedado "traumatizada" por los asesinatos de enero de 2013, dijo un abogado del consejo democrático kurdo en Francia (CDK-F).
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