¿Cuál es el verdadero significado del Halloween? Descubre su siniestro origen.
Foto: gawalpop.
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Halloween tradición con raíces en la cultura celta, en la región que actualmente ocupan Irlanda, Inglaterra y Francia, dos mil años antes de Cristo.
Los celtas eran un pueblo politeísta, cuyos cultos y rituales estaban a cargo de los druidas o sacerdotes, quienes rendían tributo a distintos dioses relacionados con los bosques, las montañas y las aguas.
Invocaban a dichos dioses en distintas épocas del año y para distintos propósitos.
En La Vedad Noticias te revelamos que entre sus divinidades estaba Samhain, palabra proveniente del irlandés antiguo que significa “fin del verano”.
También se le conoce como dios de la muerte.
De ahí durante la celebración del halloween predominen los colores naranja y negro, porque uno representa el otoño y el segundo la muerte.
Hace poco te contamos sobre los espectaculares disfraces de Mariazel, pero ahora te revelamos que el festival de Samhain marcara el fin del año celta y el inicio de otro.
Realizada la noche del 31 de octubre y durante los primeros días de noviembre, la celebración también hacía referencia a la noche de difuntos.
Concluía con la fiesta de los espíritus.
Los celtas creían que era una noche mágica, propicia para rituales paganos y los relacionados con la última cosecha y la siega de tubérculos y hortalizas.
Se hacían enormes fogatas para hacer sacrificios de animales, cosechas, así como de niños y jóvenes vírgenes.
Las doncellas y los jóvenes sacrificados antes eran violados y desangrados.
Como parte del ritual, los druidas se disfrazaban, recorrían las casas y pedían a los niños o jóvenes que, como ofrenda, serían sacrificados a este dios pagano.
Así surgiría la idea de “la treta”: si la familia se negaba a entregar “la ofrenda”, los sacerdotes marcaban la casa a manera de maldición a la familia.
Cuando accedían, dejaban una calabaza hueca con una vela, pues tenían la creencia de que así espantarían a los demonios (origen del llamado “trato”).
Lo que sucede en la actualidad para celebrar el halloween (disfraces, salir a pedir dulces o dinero, la calabaza con una vela, etcétera), no es una coincidencia.
La época en que se realizaba el halloween, era también el tiempo en que dichos sacerdotes o, incluso la gente del pueblo, practicaban brujería y hechicería.
Asimismo, realizaban sacrificios humanos y de animales, además de cultos de adivinación acerca del año que les depararía.
Creían que ese dios permitía el regreso de los muertos a sus casas, así como de demonios, fantasmas y duendes.
Esta práctica prevalece hasta nuestros días durante la noche del 31 de octubre y la madrugada del 1 de noviembre.
Con el expansionismo del Imperio Romano y la llegada del cristianismo, los druidas y sus rituales fueron desapareciendo.
Salvo algunos pueblos como el de Irlanda, donde se conservó una buena parte de esas tradiciones paganas.
Durante la Edad Media en Europa, la celebración fue recogida por distintos pueblos de origen céltico, principalmente.
Empezaron a ahuecar nabos y a colocar un carbón ardiente, bajo la creencia que iluminarían el camino de regreso de los muertos y como protección de los malos espíritus.
Luego, la celebración se transformó en All Hallow´s Eve o Día de todos los santos.
Con la migración de los irlandeses a partir del siglo XVIII a Norteamérica, también llegó la noche de Samhain.
Adaptaron sus tradiciones y entonces la celebración se comenzó a llamar halloween.
Actualmente, el halloween se celebra en varios países del mundo gracias a la influencia de Hollywood.
Paralelamente, en algunos sitios, sobre todo de Estados Unidos como la ciudad de Los Ángeles, existen grupos o sectas que conservan el aspecto pagano de la tradición a través de ritos satánicos y sacrificios.
De acuerdo al cristianismo con la muerte concluye la vida.
De modo que todo lo contrario a ello es rechazado por el cristianismo: reencarnación, fantasmas, espiritismo, altares de muertos, ofrendas, etcétera, tiene un castigo severo.
El libro de Levíticos, capítulo 20 versículo 27, dice:.
“Y el hombre o la mujer que evocare espíritus de muertos o se entregare a la adivinación, ha de morir; serán apedreados; su sangre será sobre ellos”.
Para el cristianismo, entonces, los sacrificios, las ofrendas y los altares son solo para Dios.
Y siempre es una actitud de corazón que signifique el rendimiento del “yo” ante la soberanía de Dios.
La disposición de buscar agradar a Dios por sobre todo es el sacrificio, la ofrenda, el holocausto y un altar a Dios.
Por eso, el primer libro de Samuel capítulo 15 versículo 22, dice:.
"¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas, como en que se obedezca a las palabras de Jehová?".
"Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los carneros.
".
La vida cristiana gira alrededor de Cristo y la Palabra de Dios (la Biblia).
Dios es luz, es vida y plenitud, todo lo contrario a los significados con que se relaciona la muerte.
El camino a Dios Padre es Cristo: “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto (Juan 146-7)”.
Por eso, en el cristianismo se dice que se celebra la vida y no la muerte, Deuteronomio 30:19:.
“A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia”.
Por Mario Villanueva Solorio¡Síguenos en Twitter para mantenerte informado con las noticias de hoy! Síguenos en nuestra cuenta de Instagram.
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