Unos ricos tomates son deliciosos en cualquier comida, y son aún más ricos si tú mismo los cultivas en el huerto del hogar, aunque a veces sea algo complicado conseguir frutos grandes y jugosos.
Al comenzar con tu propio huerto, los tips de crecimiento natural son la salvación para tener una cosecha buena y que el esfuerzo de varios meses dé su fruto de la mejor manera.
Así que toma nota de estos tips para lograr que tus tomates crezcan grandes y fuertes.
Con anterioridad, en las noticias te compartimos como tener tu propio árbol de aguacate en tu casa para poder disfrutar de este delicioso fruto, ahora te traemos como fortalecer tu planta de tomate para lograr el mismo resultado.
¿Cómo ayuda el ácido salicílico a los tomates?
Todos tenemos en casa este medicamento eficaz para quitar el dolor de cabeza, sí se trata del ácido acetilsalicílico o AAS, pero lo que no sabías es que este mismo medicamento ayudará a tu planta a crecer sanamente en tu huerto.
De acuerdo a estudios realizados por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, las plantas de la familia solanáceas recibían una respuesta inmunitaria mejorada cuando interactúan con el ácido.
Con este compuesto, las plantas están mucho más protegidas contra las molestas plagas de insectos y otro tipo de enfermedades que pueden afectar tu huerto.
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Según los estudios, se comprobó que estas plantas viven más tiempo y son más inmunes a las plagas, además de que sus frutos son más grandes y jugosos.
Los investigadores desarrollaron 4 formas de aplicar este componente al momento de cultivar los tomates:
Como enraizante: sumerge los esquejes durante 3 o 4 horas en un agua destilada con 1 aspirina. Esto desinfectará, protegerá del moho y activará su crecimiento.
Como potenciador del crecimiento: diluye 1 aspirina por cada litro de agua y pulveriza tus plantas con la mezcla. Úsala cada 3 semanas cuando ya se haya ido el sol para evitar quemar las hojas.
¿Cómo añadir ácido acetilsalicílico a los tomates?
Para germinar semillas: remoja las semillas en agua con aspirina antes de sembrarlas.
Conservar flores: añade una aspirina en el agua de nuestro florero para evitar que las flores se marchiten.
En el suelo: para olvidarse de las diluciones, planta una aspirina en el suelo a unos 15 o 20 centímetros de la planta y riega con normalidad.
Ahora sí, con estos tips tendrás unos jitomates grandes y jugosos en tu próxima cosecha.
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