Antes de hablar de Elon Musk situémonos en marzo de 2021 cuando un tribunal turco ordenó al sitio de noticias Diken que eliminara una historia crítica sobre un aliado del presidente del país, Recep Tayip Erdogan.
Yaman Akdeniz, un abogado turco y activista de los derechos digitales, publicó un tuit instando a sus seguidores a leer la historia antes de que la decisión entrara en vigor.
Luego, el tribunal dictaminó que su tuit también debía eliminarse. Pero durante más de un año, Twitter ha desafiado la orden, permitiendo que el tuit permanezca activo.
Si Musk hubiera sido dueño de Twitter entonces, Adkeniz podría haber tenido mala suerte. Aunque la compra de la compañía por parte del fundador de SpaceX ha estado plagada de problemas, todavía parece que está listo para hacerse cargo de la plataforma.
Enfoque de Elon Musk 'horrible pero lícito' en EE. UU.
A pesar de su insistencia en que hará de Twitter un refugio para la libertad de expresión, la visión de Musk para la moderación de contenido es cumplir con las leyes locales.
“Mi preferencia es ceñirme a las leyes de los países en los que opera Twitter”, tuiteó el 9 de mayo. “Si los ciudadanos quieren que se prohíba algo, entonces aprueben una ley para hacerlo, de lo contrario, debería permitirse”.
En EE. UU., que tiene una definición muy permisiva de la libertad de expresión protegida por la Primera Enmienda, el enfoque de Elon Musk obligaría a Twitter a permitir todo tipo de contenido que, como dicen los abogados, es "horrible pero lícito", incluido el racismo manifiesto y el doxing.
Pero las protecciones para la libertad de expresión son más débiles en muchos otros países, incluidos Turquía, India y Rusia.
Un estándar de permitir solo lo permitido por la ley resultaría en menos libertad de expresión en Twitter, no más.
En muchos países, Twitter rara vez es la plataforma más popular, pero su función como centro para activistas, periodistas y políticos significa que "se supera en su papel en la configuración del discurso público", dice Prateek Waghre, director de políticas de Internet de la Fundación Libertad en Delhi.
Actualmente, Twitter cumple con frecuencia con las solicitudes del gobierno para bloquear o eliminar material, especialmente si viola los términos de servicio de la empresa.
Pero la plataforma también suele rechazar las solicitudes de eliminación, como sucedió en el caso de Akdeniz. Entre enero y julio de 2021, Twitter cumplió con las demandas legales un poco más del 54 por ciento de las veces, pero la tasa varía mucho de un país a otro.
En Rusia, donde Twitter responde solo al 8 por ciento de las solicitudes de eliminación del gobierno, la empresa se negó a censurar el contenido relacionado con las protestas de 2021 en apoyo del político opositor Alexei Navalny.
Esto condujo a una rápida represalia: Roskomnadzor, la entidad gubernamental que supervisa la tecnología y las comunicaciones, estranguló la plataforma.
(El gobierno afirmó que esto se debía a que Twitter se negaba a eliminar contenido relacionado con la explotación infantil y el suicidio, pero ya había amenazado públicamente con castigar a las empresas de redes sociales por permitir contenido que animara a la gente a protestar).
“En los casos en los que piensen que una solicitud no cumple con la ley local de un país o su propia lectura de la ley local, pueden retroceder y decir que no la cumplirán”, dice Allie Funk, investigadora de Freedom House. director de tecnología y democracia.
Las empresas también pueden consultar documentos como el Artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que protege el derecho a la libertad de expresión, dice Jason Pielemeier, director de políticas de Global Network Initiative.
“Este es un documento que muchos países del mundo, no solo EE. UU., aparentemente han firmado y aceptado”, dice. Twitter se negó a comentar en detalle sobre su enfoque actual a las solicitudes gubernamentales.
Todas las empresas de redes sociales con sede en los EE. UU. deben cumplir con las reglas que los países estable
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