El gobernador de Oklahoma, Kevin Stitt, promulgó la prohibición al aborto más estricta de Estados Unidos, convirtiendo al estado en el primero en prácticamente poner fin a esta prácticas de la interrupción voluntaria del embarazo.
El mandatario firmó el miércoles una ley que prohíbe la interrupción del embarazo desde el momento de la fecundación, prohibiendo de este derecho a las mujeres, aunque no se restringe el uso de formas de anticoncepción que evitan que un óvulo fertilizado se implante en el útero, según cita la cadena CNN.
Como dimos a conocer en las noticias, el proyecto de ley que prohíbe casi todos los abortos en esta región estadounidense fue aprobada el pasado 19 de mayo, pero fue hasta esta semana que el gobernador firmó el decreto de ley.
Legisladores estatales aprobaron la prohibición que se aplica mediante demandas civiles en lugar de penales, similar a ley de Texas contra la interrupción del embarazo que se aprobó el año pasado.
Oklahoma enduce medidas contra el aborto
Por lo que a partir de este 26 de mayo entra en vigor el dictamen que prohíbe todos los abortos. Las únicas excepciones en la ley de Oklahoma son para salvar la vida de una embarazada o si el embarazo es el resultado de una violación o incesto que ha sido denunciado a la policía.
“Desde el momento en que la vida comienza en la concepción es cuando tenemos la responsabilidad como seres humanos de hacer todo lo posible para proteger la vida de ese bebé y la vida de la madre”, dijo el gobernador, Kevin Stitt, de acuerdo con CNN.
Un aborto es un procedimiento para interrumpir un embarazo. Se utilizan medicinas o cirugía para retirar el embrión o el feto y la placenta del útero. En gran parte de Estados Unidos el aborto es legal, sin embargo, en Oklahoma prohibió el aborto en su totalidad.
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