El Ministerio de Defensa de Rusia fijó otro plazo para que los soldados de Ucrania en la estratégica ciudad de Mariupol, en el sureste , se rindan, y dijo que las vidas de las tropas dentro de una acería se salvarán si detienen lo que llamó “resistencia sin sentido”.
“Se garantiza que todos los que depongan las armas seguirán con vida”, dijo el ministerio en un comunicado el martes, y agregó que las tropas podrían retirarse de la planta de acero entre las 14:00 y las 16:00 hora de Moscú (11:00-13:00 GMT) “sin excepción, sin armas y sin municiones”.
Rusia dio un ultimátum a las tropas ucranianas de rendirse o morir que quedó sin respuesta el domingo, un día después de que el ejército ruso afirmara haber "limpiado completamente" la ciudad.
Eduard Basurin, portavoz de los separatistas respaldados por Rusia en la región de Donbas, dijo el martes que grupos de asalto se habían trasladado a la planta siderúrgica de Azovstal en un intento por desarraigar a las tropas ucranianas.
Rusia intenta desarraigar a las tropas de Ucrania
Más tarde ese mismo día, el Ministerio de Defensa de Ucrania dijo que las fuerzas rusas habían abierto un corredor humanitario para que las tropas ucranianas que aceptaron deponer las armas pudieran abandonar la ciudad en conflicto.
“Las fuerzas armadas rusas abrieron un corredor humanitario para la retirada del personal militar ucraniano que voluntariamente depuso las armas y militantes de formaciones nacionalistas”, dijo el ministerio, y agregó que el corredor seguro se abrió a las 14:00 horas (11:00 GMT). No hubo comentarios inmediatos por parte de las autoridades ucranianas.
Al menos mil civiles refugiados en Mariupol
El ayuntamiento de Mariupol dijo que al menos 1.000 civiles se esconden en refugios debajo de la gran planta siderúrgica, que contiene innumerables edificios, altos hornos y vías férreas. Mientras tanto, Rusia intensificó los ataques en Lviv antes de seguir con Donbas.
Rusia negó los informes de que hay mujeres, niños y otros civiles allí y pidió a Kiev que “ejerza la razón”. “Pedimos una vez más a las autoridades de Kiev que demuestren razón y den las órdenes correspondientes a los combatientes para que cese su resistencia sin sentido”, dijo el Ministerio de Defensa.
“Pero, entendiendo que no recibirán tales instrucciones y órdenes de las autoridades de Kiev, hacemos un llamado a [los combatientes] para que tomen voluntariamente esta decisión y depongan las armas”.
El mayor Serhiy Volyna, comandante de la 36.ª brigada de infantería de marina de Ucrania, que todavía lucha en Mariupol, pidió ayuda el lunes en una carta al Papa Francisco.
“Así es como se ve el infierno en la tierra… Es tiempo [de] ayuda no solo con oraciones. Salva nuestras vidas de las manos satánicas”, dijo en la carta, según extractos que el embajador de Ucrania en el Vaticano publicó en Twitter.
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