La reina Isabel II de Reino Unido ha regresado al ojo público después de cinco meses de ausencia. La primera aparición pública de la monarca británica desde que se recuperó del COVID19 fue durante este martes 29 de marzo, cuando se unió a la familia real y otros dignatarios en un servicio conmemorativo en honor a su esposo, el príncipe Felipe de Edimburgo, quien murió el pasado 9 de abril de 2021.
El duque de Edimburgo, que estuvo al lado de su esposa durante más de siete décadas, falleció en su casa del Castillo de Windsor, dos meses antes de cumplir 100 años. En ese momento, solo 30 personas pudieron asistir a su funeral debido a las estrictas reglas del coronavirus, lo que significó que la reina se sentara conmovedoramente sola mientras su esposo era bajado a la Bóveda Real de la Capilla de San Jorge del castillo.
El servicio de acción de gracias de este martes, en la Abadía de Westminster de Londres, fue un evento mucho más grande, con la reina uniéndose a su heredero, el príncipe Carlos, su hijo William y su esposa Kate y otros miembros de la familia real, incluidos sus hijos. Cabe destacar que la reina Isabel II aún tiene algunos problemas de salud, pero ella decidió reaparecer por su propio pie.
La ocasión también marcó el primer evento público para su tercer hijo, el príncipe Andrés, desde que hizo un pago no revelado para resolver una demanda en Estados Unidos por acusaciones de que agredió sexualmente a una adolescente hace décadas, afirmaciones que él negó oportunamente.
Reina Isabel II apareció junto al príncipe Andrés, acusado de agresión sexual
La reina llegó a través de una entrada lateral a la Abadía para su primera aparición en público desde que se enfermó, usando un bastón y junto a Andrés, algo que generó controversia en las redes sociales.
Asimismo se informó que el príncipe Harry, quien se mudó a vivir a Estados Unidos con su esposa Meghan Markle, no asistió al servicio luego de un desacuerdo con el gobierno sobre la protección de la seguridad.
El servicio por la vida del antiguo modernizador real se produce cuando su nieto y futuro rey, el príncipe William, de 38 años, también busca llevar la monarquía hacia el futuro. El Palacio de Buckingham comunicó que la reina Isabel II, de 95 años, participó activamente en la planificación del evento conmemorativo a su fallecido esposo. Además, durante la misa la monarca se mostró muy conmovida por el momento, ya que fue captada llorando.
El día después de la muerte de la reina, conocido como Día D+1, el Consejo de Adhesión se reunirá en el Palacio de St. James para proclamar al Príncipe Carlos de Gales como nuevo soberano de Reino Unido.
No obstante, como te hemos dicho en las noticias, la reina Isabel II está por celebrar su Jubileo de Platino, por sus 70 años en el trono, convirtiéndose en una de las monarcas con mayor antigüedad en este cargo.
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