La Universidad de Pensilvania ha creado un chicle experimental llamado CTB-ACE2, el cual podría reducir en un 95% la carga viral del coronavirus en la saliva de las personas infectadas de Estados Unidos, según las pruebas iniciales.
De acuerdo al estudio, la goma de mascar contiene una proteína especial que logra “atrapar” las partículas del COVID-19 en la saliva, lo que previene que las personas contagiadas transmitan el virus al hablar, toser e incluso respirando.
De ser efectiva, la goma de mascar sería una luz de esperanza después de que un estudio reveló que aplicar distancia de dos metros no evita contagio de COVID-19, por lo que otras medidas de prevención están siendo exploradas.
El mismo año en que Rusia reportó 25,000 nuevos contagios de COVID-19 en 24 horas, el chicle creado por la universidad estadounidense podría ayudar a países donde las vacunas aún son limitadas o simplemente no disponibles.
¿Cómo funciona chicle experimental contra COVID-19?
La goma de mascar tiene copias de la proteína ACE2, encontrada en la superficie celular, que el virus utiliza como "puerta de entrada" para infectar a las celulas. Sus propiedades "médicas" no afectan su sabor, el cual es muy parecido a uno tradicional.
En las noticias te presentamos las medidas para evitar contagios del coronavirus, aún vigentes poco más de un año de que inició la pandemia de COVID-19 en el mundo, cuyo epicentro se identificó en Wuhan, China.
Por su parte, la Universidad de Pensilvania espera que su nuevo chicle experimental pueda ayudar a disminuir los contagios de coronavirus en el mundo, al presentar una medida de prevención más accesible.
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