La comunidad de inteligencia de Estados Unidos concluyó que el coronavirus no fue elaborado en un laboratorio como arma biológica, de acuerdo con un informe publicado este viernes.
La Oficina de la Directora de Inteligencia Nacional (ODNI) Avril Haines, dio a conocer en su reporte que los argumentos sobre el origen humano e intencional del coronavirus “se apoyan en afirmaciones cientÃficamente inválidas” y son “inconsistentes con la información técnica disponible sobre los coronavirus”.
De acuerdo con el informe de ODNI, quienes proponen estas teorÃas sobre el origen del virus “no tienen acceso directo al Instituto de VirologÃa de Wuhan” y han sido acusados de esparcir la desinformación.
Aunque el documento subraya que la mayorÃa de sus entidades considera que el COVID-19 no fue producto de la ingenierÃa genética, dos agencias de inteligencia creen que aún no existen evidencias suficientes para emitir una evaluación al respecto.
Aún no hay un acuerdo
“Tras examinar todos los informes de inteligencia disponibles y otras informaciones, la Comunidad de Inteligencia sigue dividida sobre cuál es el origen más probable del COVID-19. Todos los organismos consideran que hay dos hipótesis plausibles: la exposición natural a un animal infectado y un accidente asociado a un laboratorio”, se lee en el reporte.
El documento es la actualización de una revisión de 90 dÃas hecha por la administración de Joe Biden en agosto, en medio de un intenso debate polÃtico sobre cuánta responsabilidad comparte China sobre los efectos de la pandemia global con los paÃses que demoraron sus acciones para proteger a los ciudadanos.
China y el origen del COVID-19
Los expertos sostienen que las autoridades chinas no tenÃan conocimiento de la propagación de la enfermedad antes de que surgiera el primer brote.
Si bien el texto detalla que el Instituto de VirologÃa de Wuhan ya habÃa creado “quimeras o combinaciones de coronavirus similares a SARS”, esto no es evidencia suficiente para saber si el SARS-CoV-2 fue creado genéticamente en ese laboratorio.
Liu Pengyu, vocero de la embajada de China en Washington, dijo a Reuters que el hecho de que Estados Unidos utilice “su aparato de inteligencia en lugar de cientÃficos para rastrear el origen de COVID-19 es una completa farsa polÃtica”.
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