Kosovo y Serbia llegan a un acuerdo para poner fin a las tensiones fronterizas

El acuerdo negociado en Bruselas pone fin a los enfrentamientos en la frontera provocados por la disputa entre Kosovo y Serbia.



Serbia y Kosovo han llegado a un acuerdo para poner fin a un enfrentamiento en su frontera compartida que se originó en una disputa sobre las placas de los vehículos, anunció un mediador de la Unión Europea.

"Tenemos un trato", tuiteó Miroslav Lajcek el jueves. “Después de dos días de intensas negociaciones, se acaba de llegar a un acuerdo sobre la desescalada y el camino a seguir”.



El avance se produjo después de que el gobierno de Kosovo desplegó la semana pasada fuerzas policiales especiales en la frontera compartida para imponer una nueva regla de retirar las placas serbias de los automóviles que ingresan al país, diciendo que un acuerdo de 10 años había expirado.

Pristina, la capital de Kosovo, dijo que estaban replicando lo que Serbia había hecho durante la última década después de la declaración de independencia de Kosovo en 2008. Protestando por el nuevo gobierno de Kosovo, los serbios locales bloquearon la frontera con camiones.

Mientras tanto, las tropas serbias estuvieron en alerta máxima en la frontera con Kosovo. Serbia desplegó vehículos blindados, aviones militares y helicópteros cerca de la frontera en una aparente demostración de fuerza.



Según el acuerdo negociado en Bruselas, las tropas de la OTAN reemplazarán a las unidades policiales kosovares en la frontera, que se retirarán a partir del sábado. Ese movimiento coincidirá con el levantamiento de los bloqueos serbios.

Ambos países colocarán calcomanías especiales en las placas de los automóviles para eliminar los símbolos nacionales y permitir la libre circulación de los ciudadanos. Esta es una medida temporal, que permanecerá vigente hasta que se encuentre una solución permanente, dice el acuerdo.



La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que estaba de gira por la región de los Balcanes, dio la bienvenida al acuerdo. “Es bueno para toda la región”, dijo. "El diálogo ahora debe continuar". La OTAN ha tenido unas 5.000 tropas en Kosovo bajo un mandato de las Naciones Unidas desde el final del conflicto serbio-kosovar en junio de 1999.



El presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, restó importancia a las esperanzas de cualquier avance más amplio en la disputa de reconocimiento más amplia entre Serbia y Kosovo por ahora.

Serbia, con el apoyo de sus aliados Rusia y China, no reconoce la condición de estado de su antigua provincia, pero la mayoría de los países occidentales lo hacen, incluido Estados Unidos.



Las conversaciones mediadas por la Unión Europea destinadas a resolver el estancamiento, uno de los desacuerdos territoriales más intratables de Europa, hasta ahora no han logrado lograr lazos normalizados entre Kosovo y Serbia.



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