Guinea en crisis mientras los soldados reclaman el poder y anuncian el toque de queda

Guinea está en crisis mientras los soldados reclaman el poder y anuncian toque de queda hasta nuevo aviso.

Los soldados que organizaron un golpe de Estado en la capital de Guinea anunciaron un toque de queda en todo el país "hasta nuevo aviso" y el reemplazo de los gobernadores regionales por los militares, pocas horas después de que dijeran que habían disuelto la constitución y el gobierno.

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El Ministerio de Defensa de Guinea dijo que un ataque de fuerzas especiales amotinadas contra el palacio presidencial había sido repelido, pero no estaba del todo claro el domingo por la noche quién tenía el poder en la nación de África Occidental.

- Más temprano en el día, videos no verificados compartidos en las redes sociales parecían mostrar al presidente Alpha Conde rodeado de soldados. Su paradero no estaba claro. Esto siguió a informes anteriores de fuertes disparos en Conakry, cerca del palacio presidencial, aunque tampoco estaba claro quién era el responsable.

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Los hechos provocaron la preocupación y la condena de observadores regionales e internacionales, incluido el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, quien dijo que condenaba enérgicamente "cualquier toma del gobierno por la fuerza" y pidió la liberación inmediata de Conde.

- La Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) amenazó con imponer sanciones después de lo que su presidente, el presidente de Ghana, Nana Akuffo-Addo, calificó de intento de golpe de Estado, mientras que la Unión Africana dijo que se reuniría con urgencia y tomaría "las medidas apropiadas".

informa que, Estados Unidos dijo que la violencia y cualquier medida extrastitucional solo erosionaría las perspectivas de paz, estabilidad y prosperidad de Guinea.

"Estados Unidos condena los eventos de hoy en Conakry", dijo el Departamento de Estado en un comunicado. "Estas acciones podrían limitar la capacidad de Estados Unidos y otros socios internacionales de Guinea para apoyar al país mientras navega por un camino hacia la unidad nacional y un futuro más brillante para el pueblo guineano".

Después de tomar las ondas, los soldados amotinados prometieron restaurar la democracia. "El deber de un soldado es salvar al país", dijo el coronel Mamadi Doumbouya, que estaba sentado envuelto en una bandera guineana con media docena de otros soldados uniformados junto a él, al leer la declaración.

- "Se acabó la personalización de la vida política. Ya no confiaremos la política a un solo hombre, la confiaremos al pueblo", dijo Doumbouya, y agregó que la constitución también se disolvería y las fronteras se cerrarían durante una semana.

Doumbouya, quien ha encabezado una unidad de fuerzas especiales en el ejército, dijo que estaba actuando en el mejor interés de la nación de más de 12,7 millones de personas. No se ha logrado suficiente progreso económico desde la independencia de Francia en 1958, dijo el coronel, tras el golpe de Estado en Guinea.

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