Ermitaño baja de la montaña para vacunarse contra COVID-19 20 años aislado

Hace 20 años donó todo su dinero y se fue a vivir solo en la naturaleza, ahora el ermitaño baja de la montaña para vacunarse contra el COVID-19.

Panta Petrovic que es ermitaño baja de la montaña para vacunarse contra el COVID-19, esto lo hizo luego de enterarse que el mundo estaba enfrentado una pandemia de un nuevo virus, el Sars-CoV-2, por lo que tras 20 años de su autoaislamiento decidió salir de nuevo a la civilización.

Ermitaño baja de la montaña para vacunarse contra el COVID-19

Hace unos 20 años, luego de haber donado su dinero, Panta Petrovic decidió dejar atrás su vida e irse a vivir en una cueva en Serbia, y como cualquier ermitaño evitó el contacto humano y se dedicaba a cuidar a Manta, su cerda salvaje de 200 kilos.

- Pero consciente de que el mundo enfrenta una pandemia, la cual ha cobrado la vida de 4 millones 375 mil 086 personas y contagiado a 208 millones 044 mil 254 más, el ermitaño baja de la montaña para vacunarse contra el COVID-19 y ya ha recibido sus dos dosis, ya que los anticuerpos del coronavirus pueden durar un año.

Ermitaño baja al “mundo” por artículos

El ermitaño baja de la montaña para vacunarse contra el COVID-19, se llama Panta Petrovic y actualmente tiene 70 años de edad, vive en una cueva que tiene artículos necesarios y sobrevive de setas y pescados que consigue en el arroyo, pero busca esta protegido con las vacunas contra el coronavirus ante un sistema inmune debil.

- Su cueva está equipada con una bañera herrumbrada que utiliza como baño, algunas bancas y una paca de heno que usa como cama.

El ahora ermitaño contó que cuando formaba parte de la sociedad solía trabajar como peón en el mercado negro, en un pueblo llamado Pirot y se casó varias veces, pero como es un amante de la naturaleza, descubrió que aislarse de la soledad le daba paz y libertad.

Panta Patrovic, el ermitaño de una cueva en Serbia, asegura que baja ocasionalmente al pueblo por artículos indispensables que no hay en la naturaleza, pero como en una ocasión unos lobos mataron a algunos de sus animales cerca de su cueva, decidió trasladarlos a una choza que montó a las afueras de la ciudad serbia en donde cree que estarán a salvo.

Entre sus animales están cabras, gallinas, 30 perros y gatos y su jabalí adulta llamada Mara de unos 200 kilos.

- Entonces, fue en los momentos en los que baja de la montaña para proveerse de víveres que supo del coronavirus y cuando se enteró que las vacunas habían llegado el ermitaño baja de la montaña para vacunarse contra el COVID-19.

Patrovic dice que no entiende las quejas de los escépticos por las vacunas contra el coronavirus, pues cree que es un proceso que ayuda a erradicar las enfermedades y fue hasta después que el ermitaño baja de la montaña para vacunarse contra el COVID-19, que permitió que el mundo conociera su cueva.

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