El convicto había fingido la desaparición de su esposa, Alexia Daval, e incluso lideró uno de los eventos organizados en su memoria en toda Francia.
Un hombre francés fue condenado a 25 años de prisión por el asesinato de su esposa y posterior incineración de sus restos, en un caso que sacudió a toda Francia.-
Daval cometió el "crimen conyugal casi perfecto"
Según medios franceses, los fiscales solicitaron la cadena perpetua para Jonathann Daval, de 36 años, quien escuchó este sábado el veredicto final de un tribunal con respecto al caso del 2017.
Tras haber mentido a la policía y fingir la desaparición de su esposa, nacida Alexia Foulliot, diciendo que no había regresado de una sesión de jogging, Daval confesó haberla matado a golpes y ahorcándola.
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— La Provence (@laprovence) November 21, 2020
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El convicto se retractó en una ocasión de su confesión inicial, argumentando que la familia de la víctima tenía un complot en su contra, pero después reconoció haber sido el único autor del asesinao de su esposa.
- Los restos carbonizados de Alexia, de 29 años, fueron hallados bajo un montón de ramas cerca de su ciudad de Gray-la-Ville en el este de Francia en octubre de 2017, según lo que pudo enterarse La Verdad Noticias.
Jean-Pierre Fouillot, el padre de Alexia, pasó un brazo por los hombros de su esposa Isabelle cuando se emitió la decisión del tribunal.
Unos minutos después, la madre, Isabelle Fouillot, salió a hablar con los periodistas, como había hecho durante todo el juicio.
"Es una muy buena decisión, exactamente lo que esperaba, en el apogeo de nuestro sufrimiento. Eso nos permitirá pasar página", dijo.
- Los fiscales que pidieron la cadena perpetua para el feminicida calificaron el asesinato como un “crimen conyugal casi perfecto.”
convicto
Después de la muerte de su esposa, Daval había tenido una figura angustiada, y se mostró llorando en una conferencia de prensa con sus suegros y dirigiendo uno de varios eventos organizados en todo el país en su memoria.
Tres meses después, los fiscales dijeron que el trabajador informático confesó el asesinato, admitiendo que había golpeado a su esposa en una acalorada discusión, golpeándola en la cara contra una pared de concreto y estrangulándola.
Daval cambió su historia varias veces, en un momento dado que retiró su confesión, culpó a su cuñado y finalmente admitió todo de nuevo.
El lunes, cuando el juez le preguntó si admitía "ser la única persona implicada en la muerte" de su esposa, Daval respondió "sí", pareciendo al borde de las lágrimas.
El crimen conmocionó profundamente a Francia, y casi 10,000 personas acudieron a la tranquila ciudad de la pareja para una marcha silenciosa en su memoria.
El asesinato puso de relieve el flagelo de la violencia contra las mujeres en el apogeo de la campaña mundial #MeToo contra el abuso sexual y el acoso a las mujeres.
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